jueves, 19 de enero de 2017

Zoe

Es tan dulce mi vecina. Se llama Zoe. No tiene seis años. Pero es alegre como un cascabel. La conozco desde que nació prácticamente y su madre le gritaba cuando lloraba demasiado. Le acaba de gritar de vuelta. Pobre. ¿Quién nos enseña a ser padres o madres? Pero es tan dulce con su remera de Frida que dice "Viva la vida" y sus cantos y como le gusta últimamente hacer sonar las copas delicadamente para hacer música. En fin. Creo que me hubiera gustado tener una hija. Tal vez. ¿Le hubiera gritado si lloraba? ¿Le hubiera comprado una remera de Frida con una inscripción que diga "Viva la vida"? ¿La hubiera criado sola, sin padre, tan bella y buena como es, como la escucho mientras escribo esto y actualizo mi estado? Soltera, sin hijos.

2 comentarios:

  1. Pobre Zoe, tan alegre y con una mamá gritona. Varias cosas: tener hijos y criarlos, no es tarea fácil. Pero nadie nos obliga a ser madres. Es una elección. Yo también largué al aire algún que otro grito a mi Tincho, pero no era algo habitual. Mi vecina de abajo vive gritándoles a sus cuatro (cuatro!) hijos, pero bueno, eso es tener hijos, bancarse berrinches, poner límites, hacerse cargo, con cansancio o sin el... Es hermoso ser madre, pero es trabajoso, y no debería ser LA meta en la vida. Es algo muy importante pero una es muchas más cosas que ser madre. Y si no tenes hijos, también la vida es bella y te ofrece mil cosas para vivir y disfrutar. Un beso

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  2. Hola, Veroka. Claro que si, la vida es bella -cuando no terrible- y nos ofrece mil cosas para vivir y disfrutar. Es así nomás. Creo que como madre hubiera sido un desastre sobre todo en lo de poner límites. Menos mal que no tuve hijos. Creo que también elegí -pese a mi anhelo- no tenerlos porque sí. Y me hago cargo de esa elección también. Como vos decís no es LA meta en la vida. Un beso, gracias por tus palabras y por pasar. :)

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