martes, 17 de enero de 2017

Día 9

Se van acabando los días de furia de antaño. Otras furias vendrán, otras alegrías, otros días. Habrá que identificarlas, a veces es difícil distinguir una furia, de una rabia, de una bronca, de una angustia, de una tristeza. A veces son lo mismo. Difícil distinguirlas, más complejo darles voz, palabra, cuerpo. Más difícil verbalizarlas, Más complicado todavía encauzarlas. Dad palabra al dolor, dice el gran Bardo. el dolor que no habla gime en el corazón hasta que lo rompe. Porque a veces, como él mismo también dijo, la vida no es más que eso, un cuento contado por un idiota, lleno de ruido y de furia que no significa nada. Dos citas en dos oraciones seguidas. Por hoy quizás la furia se haya agotado, y las palabras también. Y el resto será -al menos en esta pantalla por hoy- silencio. Jaja.

No hay comentarios:

Publicar un comentario