miércoles, 17 de mayo de 2017

Dia 44

Son extraños los sueños. (Borges decía que son un género literario más o algo así).Guardan su propia lógica y funcionan como disparadores, como recordatorios, profecías y en ocasiones como señales de alerta.Sueño mucho, todo el tiempo. Muchas veces recuerdo los sueños al despertar, otras los olvido. Anoche por ejemplo, una galería de personajes, pesadillas que no lo eran, situaciones inverosímiles que vivía con la mayor naturalidad. La magia de los sucesos oníricos que se recrean como reales y siendo absurdos los aceptamos como cotidianos. Rostros, personas, familiares y extraños se conjugaban para hacer que todo fuera bizarro y ajeno. Lugares, el campo, una iglesia, erotismo, sangre. No sé con qué tendrá que ver todo eso quizás con vivencias diurnas, con deseos, temores. A veces mis sueños no entienden lo que sueño -¿pocas veces?- y sueño con palabras en otro idioma como aquél: You are too pliant o el otro día que me desperté diciendo: bonheur. Y tuve que buscarlo en el diccionario.


martes, 16 de mayo de 2017

Día 43

La muerte te acecha, hermano
La muerte: ese tumor que nos extirpamos todos los días
Cuando salimos a la vida, que nos llama a los gritos.
Esa negra y virulenta mano que nos golpea un día
Y otro y a todas las horas,
las más felices y también las más inesperadas 
Que nos dice: Aquí estoy, tomame, poseeme,
llévame contigo.



Sé que no te rendís, acá nadie se rinde,
La pelea es una, es justa, y hasta el final.
La muerte nos seduce, a todos,
Y al nombrarla quizás la morimos un poco,
Y al escribirla quizás también la borramos
con otro aliento más
De la faz, de nuestros rostros cansados,
De tu voz que ruge y que dice:
Acá estoy, conmigo no podrás.



16-05-2017

sábado, 6 de mayo de 2017

Dia 41

Nací en una familia de hombres y mujeres pasionales. Quizás demasiado pasionales e intensos. Es por eso que me enseñaron de algún modo que no logro definir ahora, a disimular o dulcificar mis sentimientos y emociones. A mi madre le gustaba hablar de la virtud de la templanza. La verdad siempre me costó templar el carácter. Sigo intentando todos los días encontrar el equilibrio y la armonía. En relación a un otro, a la hora de expresarse, los afectos estaban confinados al posesivo: "Te quiero". Decir "te amo" era considerado cursi, una debilidad que uno no se podía permitir. En todo caso estaba la exageración del "te adoro" que no podía ser tomada demasiado en serio y que por su intensidad se evaporaba rápidamente. Hago este análisis porque creo que la formación y transmisión del lenguaje hace a nuestro modo de ser, de vivir, de pensar y sentir. Rota esta limitación quizás sea tarde para amar. Ya pasó demasiada agua bajo el puente. Y tal vez no esté a tiempo de experimentar ese sentimiento tan único y pleno. O sí,  quien sabe. En todo caso siempre debería haber tiempo para dar y recibir amor. Para amar y sabernos amados al mismo tiempo.



jueves, 4 de mayo de 2017

Dia 40

A veces uno se queda sin palabras. No porque no las tenga en la punta de la lengua siempre a punto de estallar en el aire. No porque carezca de ellas oportunas o no, en un infinito arsenal de vocablos. Quizás a veces el silencio también es un modo de comunicarse. O es que uno -una- está tan sumergido en el hacer que queda poco espacio para el hablar o  el decir. O que se yo, es que hay cosas que no vale la pena contar o quizás que uno considera que no valen la pena. Es difícil distinguir unas de otras. Lo efectivamente intrascendente de lo apenas significativo. Quien sabe, el tiempo transcurre, entre silencios y palabras, las que uso para trabajar porque convengamos en que trabajo con la palabra...y las que vuelco entre otros lados en este blog, ocasional o cotidianamente.