miércoles, 29 de septiembre de 2021
Parole
sábado, 25 de septiembre de 2021
Aikido con Ki
El aikido o aikidō [en japonés, 合気道、合氣道, romanizado: “vía de la unificación de la energía vital”, "camino de la unión de la energía" o también "camino de la armonía de la energía vital"], es un gendai budō o arte marcial tradicional moderno del Japón. Fue desarrollado inicialmente por el maestro Morihei Ueshiba (1883-1969), aproximadamente entre los años de 1930 y 1960.2 A partir de varios estilos de artes marciales clásicas y tradicionales del Japón, con armas, y de lucha cuerpo a cuerpo.
Lo primordial en la práctica del aikido es vencerse a uno mismo en lugar de cultivar la violencia o la agresividad o, en palabras de Morihei Ueshiba O-sensei, «masakatsu agatsu katsuhayabi» (transliteración del japonés 正勝吾勝, 'victoria verdadera', 'victoria final sobre uno mismo, aquí y ahora'). Por consiguiente, el practicante no busca la humillación ni la derrota del otro, sino la forja autónoma del carácter y la unificación del cuerpo, mente y espíritu mediante el entrenamiento continuo.
El fundamento del aikido, como arte marcial interna es el desarrollo del autocontrol para lograr armonizar con el opuesto por medio de la regulación del espacio, el tiempo y la energía, independientemente de la masa, género, edad o fuerza física del practicante. Lo cual se puede sintetizar en la búsqueda del shikaku (punto ciego), por medio de kuzushi (desequilibrios) y del Tai sabaki (movimiento corporal); principios que se manifiestan en las acciones de irimi (entrar, arrasar), atemi (golpear), kokyu-ho (control de la respiración), sankaku-ho (principio de triangulación ofensiva y defensiva), tenkan (pivote o giro del cuerpo), y tenshin (desvíos o absorción) entre otros. Sus técnicas a mano vacía y con las armas tradicionales incluyen: esquivas, caídas, desvíos, golpes a puntos vitales, derribos, proyecciones, lanzamientos, luxaciones, estrangulaciones e inmovilizaciones, uso de puntos de presión y controles.
El Aikido, al estar bajo la influencia del sintoísmo, el budismo zen y, en menor medida, por el taoísmo, busca formar a sus practicantes como promotores de la paz y del entendimiento mutuo entre culturas y naciones.
martes, 14 de septiembre de 2021
miércoles, 8 de septiembre de 2021
¿Y qué?
- ¿Y qué si no me amás?¿Y qué si yo no te amo?¿Y qué si celebramos nuestros cuerpos?Eso. Sólo eso. Tanto como eso.Todo y nada a la vez.La elegante charla, el devenir de las horas.Las lecturas compartidas, la libertad don supremo.¿Y qué si me voy por otros derroteros?Vos por tus caminos, yo por mis carreteras.A contemplar otros ojos, ojos oscuros, negros.A tirarme a otros brazos, brazos jóvenes y fuertes.Una noche, quizás dosno más.O sí, quien puede saberlo.Y festejo la vida, la pulsión de vida, el principio del ello.La aniquilación del superyó castigador.¿Y qué si en esta encarnación soy comunistay abomino de la propiedad privada?Anarquista que desafía todo orden pre-establecido.Budista, vegetariana, amante de las creaturas vivas.Y soy puro goce, disfrute puro.Del universo y tus manos, sus brazos, tu boca, su mirada.¿Y qué más da si no hay otra cosa que el hoy?Otro instante que este.Otro momento que el presente.Que es misterio, don y regalo.Acá y ahora. Siempre.Amor.
viernes, 23 de julio de 2021
Mohammed
viernes, 9 de julio de 2021
Cuatro instantes, Cuatro imágenes, un poema.
LA VIDA ETERNA:
¿Qué hora es?
Pregunto y repregunto, como los niños que quieren llegar al destino final de un viaje de vacaciones veraniegas.
¿Qué hora es?
Interrogo, inmersa en un rulo eterno e infinito, perpetuo, imperecedero como la vida eterna que los santos se granjearon.
¿Qué hora es?
Incansable repito. Y me decís 8:15. Y a las 3:00 pm, las quince, las tres de la tarde en punto. Y expiro y exhalo y digo: "Todo se ha cumplido". Y muero para resucitar en tus brazos otra vez.
Dolores María Velasco Suárez
(Hospital Ramos Mejía, escrito en el mes de mayo).
sábado, 3 de abril de 2021
AUTOPRESERVACIÓN/SELFPRESERVATION
HENRY CARTIER BRESSON
"When you teach your daughter, explicitly or by passive rejection, that she must ignore her outrage, that she must be kind and accepting to the point of not defending herself or other people, that she must not rock the boat for any reason, you are NOT strengthening her prosocial sense, you are damaging it--and the first person she will stop protecting is herself.”